En septiembre de 2015, más de 180 estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) acordaron un plan de acción para transformar nuestro mundo. Así, se estableció la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

La agenda 2030 gira en torno a cinco ejes centrales: planeta, personas, prosperidad, paz y alianzas, y está integrada por 17 objetivos de desarrollo sostenible y 169 metas. Suponen un nuevo reto de la comunidad internacional para lograr erradicar la pobreza, extender el acceso a los derechos humanos, y lograr un desarrollo económico global sostenible y respetuoso con el planeta y los recursos que ofrece.

Los ODS fueron diseñados e implementados para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que para el 2030 todas las personas disfruten de paz y prosperidad. Además, tienen un carácter integrado e indivisible y cubren las tres esferas del desarrollo sostenible: la ambiental, la social y la económica. En el mundo actual, interconectado y complejo, resulta imprescindible ir más allá de las causas particulares de los problemas de sostenibilidad. La Agenda 2030 proporciona un marco único para abordar de forma estratégica los grandes desafíos del desarrollo sostenible a los que nos enfrentamos.

En este marco, el ODS 4 juega un papel fundamental para abordar los desafíos a los que se enfrenta la sociedad y lograr la consecución del resto de ODS. Por ello, la LOMLOE incluye aspectos relacionados con la sostenibilidad con un enfoque transversal, consumo responsable…

Ya el preámbulo de la Ley, “reconoce la importancia de atender al desarrollo sostenible de acuerdo con lo establecido en la Agenda 2030. Así, la educación para el desarrollo sostenible y la ciudadanía mundial ha de incardinarse en los planes y programas educativos de la totalidad de la enseñanza obligatoria, incorporando los conocimientos, capacidades, valores y actitudes que necesitan todas las personas para vivir una vida fructífera, adoptar decisiones fundamentadas y asumir un papel activo –tanto en el ámbito local como mundial– a la hora de afrontar y resolver los problemas comunes a todos los ciudadanos del mundo”.

Muy en relación con el propio planteamiento de este curso, que trata de interrelacionar aspectos muy diversos que engloban la idea de sostenibilidad, también en el preámbulo se nos indica que  “la educación para el desarrollo sostenible y para la ciudadanía mundial incluye la educación para la paz y los derechos humanos, la comprensión internacional y la educación intercultural, así como la educación para la transición ecológica, sin descuidar la acción local, imprescindibles para abordar la emergencia climática, de modo que el alumnado conozca qué consecuencias tienen nuestras acciones diarias en el planeta y generar, por consiguiente, empatía hacia su entorno natural y social”.

Además, también se recoge que los centros docentes “han de promover una cultura de la sostenibilidad ambiental, de la cooperación social, desarrollando programas de estilos de vida sostenible”. Y se recuerda que, tal y como se establece en el cuarto Objetivo de Desarrollo Sostenible y de la Agenda 2030, “la educación para el desarrollo sostenible y para la ciudadanía mundial se tendrá en cuenta en los procesos de formación del profesorado y en el acceso a la función docente.”

Esto lleva a que muchos docentes estén muy interesados en la incorporación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 en sus centros educativos.  De manera que 128 participantes de diferentes etapas educativas están realizando el curso tutorizado online “Educación para un desarrollo y estilos de vida sostenibles'' del Ministerio de Educación y Formación Profesional, a través del INTEF, en esta I edición de 2022.

El curso está dividido en 6 bloques donde los contenidos se han estructurado partiendo, especialmente, de la meta 4.7. de la Agenda 2030,  que pretende  asegurar que todos los alumnos adquieran los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para promover el desarrollo sostenible, entre otras cosas, mediante la educación para el desarrollo sostenible y los estilos de vida sostenibles, los derechos humanos, la igualdad de género, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y la contribución de la cultura al desarrollo sostenible.

El primer bloque de contenidos permite conocer, analizar y ser conscientes de los desafíos medioambientales globales, desarrollando dentro de los cuatro bloques siguientes algunos de ellos, como:

-Consumo y alimentación.

-Cambio climático.

-Desigualdad frente a la equidad y justicia ambiental.

-Biodiversidad y diversidad cultural.

Todo el trabajo realizado a lo largo del curso va encaminado a la tarea final, que consiste en diseñar un plan con aplicabilidad en el contexto educativo.

En cada uno de los bloques se sigue una estructura similar que combina, casi simultáneamente,  la aportación de información, actualizada y relevante, con el uso de recursos, herramientas y experiencias que ayudan a la reflexión y diseño de tareas, proyectos o planes para su aplicabilidad en el aula y en los centros.

El curso finaliza el 6 de mayo, pero te animamos a inscribirte en la próxima convocatoria. ¡Te esperamos!

@nieves__moreno

Coordinadora del curso Educación para un desarrollo y estilo de vida sostenibles